La energía hidroeólica hace de El Hierro una isla sostenible

La isla canaria de El Hierro será la primera del mundo que se abastecerá única y exclusivamente con energías renovables.  Un nuevo sistema basado en una combinación de energía eólica e hidroeléctrica cubrirá por completo la demanda eléctrica  de la isla.

El Hierro es la isla más pequeña y joven de las Islas Canarias, donde se preocupan por el respeto hacia la herencia insular y la conservación de los recursos naturales.

La isla ha implantado el Programa “100% de energías renovables para el suministro energético de la isla”. Para poder autoabastecerse sólo con energías renovables se han propuesto tres estrategias: ahorro energético,  abastecimiento 100% renovable y  un programa de transporte limpio.

La isla de El Hierro, al igual que el resto del archipiélago, no está conectada a ninguna red eléctrica del continente, ni a ninguna de las demás islas. Tiene, por lo tanto, una red eléctrica aislada que, para garantizar su suministro había necesitado siempre de una central térmica de diesel y fuel-oil convencional. Esta situación elevaba el precio de la electricidad por encima del de la Península y por ello necesitaba ser subvencionado.

El sistema hidroeólico

El viento se convierte en un recurso natural cuando se transforma en energía eólica, pero poder aprovechar todo ese potencial para abastecer la isla no es sencillo. El principal problema de las energías renovables, y en concreto de la energía eólica, es su variabilidad, que afectaría a las débiles y pequeñas redes eléctricas de la isla. Una solución para ello es almacenar esa energía y de esa manera aprovechar al máximo una fuente de energía intermitente convirtiéndola en un suministro de electricidad controlado, constante y disponible.

El sistema hidroeólico de este conjunto renovable se basa en el almacenamiento de agua en altura. Los equipos de bombeo funcionan con energía eólica que eleva el agua a nivel del mar hasta el cráter de un volcán. Cuando existe demanda de electricidad en ausencia de viento, esta agua se libera y mueve una turbina que genera electricidad.

En conjunto, el sistema dispone de:

Un parque eólico con 11,5 MW

Una central hidroeléctricade 11,3 MW,  con una estación de bombeo de 6 MW, que subirá el agua hasta el cráter-depósito superior

Una central térmica diesel de 12,7 MW, ya existente como garantía de funcionamiento

Una planta desaladora que cubrirá las pérdidas producidas por la evaporación en los depósitos

Este tipo de sistema de almacenamiento de energía fue usadoya en 2011 en Estados Unidos para cubrir las demandas pico que se alcanzaron por ser uno de los veranos más calurosos de la historia. Además, ha sido recomendado recientemente por Steven Chu, Secretario de Energía de los Estados Unidos y Premio Nobel de Física en el año 1997, para su utilización en su país.

La mayor parte de la energía generada en la isla (80%) proviene de la central hidroeléctrica, utilizándose la mayoría de la energía eólica para alimentar el sistema. El excedente se verterá directamente a la red, sirviendo para la desalación de agua en las dos plantas que tiene El Hierro. El 20% restante se obtendrá de paneles solares fotovoltaicos y colectores solares térmicos diseminados por el territorio. El siguiente paso será el cambio del vehículo de combustión al vehículo eléctrico, para completar el círculo de total independencia energética.

El diseño pretende cubrir un consumo previsto de 48 Gigavatios-hora en 2015, es decir, lo que consumen los residentes y los 60.000 visitantes que recibe cada año.

Ventajas

En cuanto a los beneficios medioambientales, el Instituto para la Diversificación y Ahorro de Energía (IDAE) estima que se evitará la emisión a la atmósfera de 18.700 toneladas al año de CO₂.

Además, supondrá una reducción de 6.000 toneladas de consumo de diesel, lo que equivale a 40.000 barriles de petróleo que tendrían que llegar importados en barco a la isla, para mantener en funcionamiento la central térmica. La volatilidad de los precios del petróleo dejará de tener impacto en el coste de la energía producida, ya que se evitará completamente el uso de combustibles fósiles, salvo en situaciones de emergencia. Esto supondrá un ahorro de más de 1,8 millones de euros anuales.

La experiencia es altamente replicableen otras islas y en la Península, ya que facilita la integración de la eólica en el sistema eléctrico nacional.

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