España cuenta con 82 reservas naturales fluviales, es decir, tramos fluviales con escasa o nula intervención humana y con un muy buen estado ecológico. La declaración, acordada en el Consejo de Ministros del pasado viernes, garantiza de cara al futuro la protección de los ríos mejor conservados de las demarcaciones hidrológicos bajo tutela de la administración central (Tajo, Duero, Guadiana, Guadalquivir, Júcar, Segura, Ebro, Miño-Sil y Cantábrico).
Estamos ante un primer paso de cara a garantizar la protección de los mejores ríos de la Península Ibérica, ya que en este acuerdo se han declarado solamente aquellos tramos fluviales identificados en los planes hidrológicos con «muy buen estado ecológico». En los próximos meses se espera que se declaren las correspondientes a las cuencas internas bajo tutela de las comunidades autónomas (Cataluña, Andalucía y Galicia), que sumarán unas 75 reservas fluviales, con 570 kilómetros más.
También queda pendiente la declaración de aquellos ríos identificados como reservas naturales fluviales en los planes hidrológicos pero que no alcanzan el «muy buen estado ecológico». Esta declaración queda pendiente de la entrada en vigor de una modificación legislativa, del Reglamento del Dominio Público Hidráulico, actualmente en tramitación. Tras la culminación de este proceso, si todo trascurre por los cauces previstos, se contará con una red de reservas naturales fluviales suficientemente representativa de la tipologías de ríos existentes en el país.
Ecologistas en Acción muestra su satisfacción, pues ocho de las reservas 82 reservas declaradas fueron propuestas por la organización ecologista tras un de identificación realizado en las cuencas del Guadiana y el Segura entre 2014 y 2015. Así, 352 kilómetros de ríos no identificados inicialmente por las confederaciones hidrográficas han sido incluidos en el acuerdo actual gracias a Ecologistas en Acción.
Roberto Herreros | Prensa Confederación de Ecologistas en Acción