Ecologistas en Acción, SEO/BirdLife, Trashumancia y Naturaleza, WWF/Adena y Ecoactiva recuerdan los beneficios de esta actividad, el grave peligro de desaparición que corre y solicitan a las administraciones su apoyo decidido para mantenerla.
Actualmente existen en España poco más de 300.000 cabezas de ganado trashumante, frente a los cinco millones con los que contábamos el siglo pasado. A pesar de ser un ejemplo de sostenibilidad, las 10.000 familias que se dedican a esta práctica ancestral se ven abocadas a abandonar la actividad ante la falta de una política decidida de apoyo.
La trashumancia proporciona numerosos beneficios, no sólo ambientales, para el conjunto de la sociedad. El paso del ganado aumenta la fertilidad de nuestros suelos amenazados por la desertificación, al incorporar estiércol y otros restos vegetales a su paso. Además, algunos de los bosques más importantes de nuestro país se han desarrollado y conservado gracias a esta práctica, como los pinares de Guadarrama o la Serranía de Cuenca, los hayedos y robledos de la Cornisa Cantábrica o los encinares y alcornocales de Andalucía y Extremadura. Los animales se alimentan de materia fácilmente combustible actuando eficazmente en la lucha contra incendios.
Los rebaños trashumantes benefician directamente a la biodiversidad, al conservar numerosas razas autóctonas en peligro de desaparición, como la oveja rubia de colmenar o la vaca tudanca. Los efectos también son positivos para la flora, al contribuir cada oveja a la dispersión de más de 5.000 semillas al día, unos cinco millones de semillas por rebaño, y a la fauna silvestre, sobre todo aves, que depende de los espacios abiertos pastoreados.
Por otra parte, este tipo de ganadería es la más eficiente aprovechando superficies pastables, consumiendo recursos que no compiten con la alimentación humana, como rastrojos, hojas de vid o pastos, algo especialmente importante en el contexto actual de crisis alimentaria. Esto permite a los rebaños ser prácticamente autosuficientes, no dependiendo su alimentación de piensos importados que –dado su elevado precio- están poniendo en jaque la rentabilidad de las explotaciones ganaderas más intensivas.
El hecho de que el movimiento de los rebaños se haga a pié permite el ahorro de combustibles fósiles, y como las fechas de los traslados son flexibles (en función de la disponibilidad de pastos en los lugares de destino) esto permite una mayor adaptación a los efectos del cambio climático. Los beneficios trascienden además al plano social, la cultura trashumante tiene en España una historia de más de 6.000 años, conservando prácticas de manejo tradicional del ganado o el empleo de perros pastores, prácticamente desaparecidas en la ganadería intensiva, que no puede perderse.
Pero a pesar de esto, las familias trashumantes ven cada vez más difícil continuar con su actividad. Las numerosas trabas burocráticas a las que tienen que hacer frente, las complicaciones para pasar con los rebaños de una Comunidad a otra por temas de sanidad animal, y la falta de un sistema de ayudas adecuado son algunos de los problemas a los que tienen que hacer frente.
Para solucionar esta situación, Ecologistas en Acción, SEO/BirdLife, Trashumancia y Naturaleza y WWF/Adena solicitan al Gobierno:
La creación de un registro único de rebaños trashumantes, que facilite las gestiones a los ganaderos en temas como la sanidad animal o el cobro de las ayudas existentes.
La creación de una marca de calidad diferenciada que permita al consumidor identificar y valorar los productos de los rebaños trashumantes, como corderos y terneros. Algunos quesos tan conocidos como la torta del casar o la serena proceden de oveja merina trashumante.
La restauración de las cañadas reales y zonas de vaguada, para permitir el paso, la alimentación y el descanso del ganado.
Por último, aprovechando el debate actual sobre la política agraria común, establecer una línea horizontal de ayudas de desarrollo rural para la ganadería trashumante, en reconocimiento a los bienes y servicios que proporciona al conjunto de la sociedad.
Si la administración no interviene decididamente es posible que esta sea una de las últimas oportunidades que tengamos de ver pasar los rebaños trashumantes por Madrid, por lo que Ecologistas en Acción, SEO/BirdLife, Trashumancia y Naturaleza y WWF/Adena animan a acompañar a los pastores y su ganado el próximo domingo 26 de octubre, en su recorrido por el centro de la capital.