- Hoy 3 de abril se reúne la Comisión de Explotación del Acueducto Tajo-Segura para aprobar un nuevo trasvase. Aunque según las normas de explotación del Memorándum los niveles de los embalses de cabecera del Tajo permitirían aprobar nuevas cesiones de agua, estas no tienen que producirse obligatoriamente.
- Ecologistas en Acción insta a la ministra Isabel García Tejerina a que reconsidere esta opción ante la situación de alerta por sequía en la que se encuentra la cabecera del Tajo.
Las precipitaciones de los últimos dos meses han provocado que los niveles de los dos embalses de cabecera de la cuenca del Tajo hayan aumentado sensiblemente su volumen de agua embalsada. En tan solo un mes, los embalses de Entrepeñas y Buendía han pasado a doblar su volumen (de 240 Hm3 a mediados de febrero a los más de 470 Hm3 actuales). A pesar de ello, este volumen representa tan solo el 21 % del volumen de ambos pantanos (26 % Entrepeñas y 16 % Buendía). Son unos porcentajes pírricos e insuficientes, que no muestran una situación de normalidad en la cabecera del Tajo.
Según las normas de explotación del Acueductos Tajo-Segura (ATS), blindadas legalmente en lo que ha denominado el Memorándum del Tajo-Segura, por encima de la cota de los 400 Hm3 es posible autorizar nuevos trasvases. Sin embargo, estas normas no obligan a que estos trasvases deban producirse necesariamente.
Hay que tener en cuenta que la gestión realizada en la cabecera del Tajo solo sirve a los intereses de los receptores del transvase y no a satisfacer las demandas y usos de la cuenca cedente. La Directiva Marco del Agua obliga a estos deban garantizarse previamente. Durante la pasada semana las aportaciones de los ríos de la cabecera del Tajo oscilaban alrededor de los 60 m3/segundo, mientras que los caudales en Aranjuez eran de tan solo 8 m3/segundo. Es decir, desde el Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente se está procediendo a un «secuestro legal» del río Tajo.
De autorizarse un nuevo trasvase dejaría de nuevo a la cabecera del Tajo a una situación próxima a la emergencia. Sin duda, se comprometería de nuevo la disponibilidad de recurso en la cabecera de cara a la temporada de primavera/verano. Aunque estos dos últimos meses hayan sido abundantes en precipitaciones, venimos del periodo más seco de los últimos treinta años. Es, por tanto, sumamente irresponsable comprometer los recursos actuales cuando no está garantizado que los próximos meses vayan a traer nuevas lluvias.
Ecologistas en Acción insta a la ministra Isabel García Tejerina a que reconsidere su idea de aprobar un nuevo trasvase. Las actuaciones para paliar la escasez de la cuenca del Segura deben pasar por adaptar las demandas a la existencia de los recursos propios y a las futuras reducciones generadas por el cambio climático. Desde el ministerio se debería estar promoviendo medidas como el control de la existencia de regadíos ilegales o la reducción de la superficie de regadío y dejar al margen medidas electoralistas, antiambientales y que fomentan enfrentamientos territoriales.
Raúl Urquiaga | Ecologistas en Acción