El interés por la moda sostenible por parte de los “Millennials” está experimentando un gran crecimiento en los últimos años en España, aunque aún queda lejos del volumen de negocio que representa en otros países, como Italia o Francia. Así lo manifiesta el estudio: “España, “Millennials” compras y dinero” desarrollado por Clearpay, la compañía líder en el segmento “Buy Now, Pay Later” en colaboración con YouGov el grupo internacional de investigación y análisis del comportamiento del consumidor.
Así, el mismo revela que en la actualidad 4 de cada 10 jóvenes de nuestro país apuestan ya por la moda sostenible, que es un tema que les inquieta y al que le dan prioridad, mientras que en la Generación X serían solo 3 de cada 10.
Además, otra de las señas de identidad de este joven grupo de población es que están dispuestos a gastar algo más de dinero por una prenda que puedan usar más tiempo, así lo afirma el 42% de los encuestados. Aunque el 40% también señala que optaría por una combinación de ambas: buena calidad y precio más asequible.
Por otra parte, la moda es una de sus principales prioridades, ya que el 49% de los encuestados afirma que a la hora de administrar sus ingresos dan prioridad a los gastos procedentes de la compra de ropa sobre el ocio u otros.
Una generación más comprometida y que prioriza la moda sobre otros gastos.
Los “Millennials” son aquellos jóvenes que nacieron entre 1982 y 2004, una generación digital, hiperconectada y con mayor poder adquisitivo. A nivel global representan ya el 27% de la población mundial y desde el año pasado son el 35% de la fuerza laboral. Una joven generación también conocida como “Y” que convive con la etiqueta de ser considerada como: perezosa, narcisista y muy consentida, pero también son críticos, ahorradores y comprometidos con las causas en las que creen.
El 53% de los “Millennials” se consideran a sí mismos más ahorradores frente al 52% de la Generación X. Para este grupo de población la moda es una de sus principales prioridades a la hora de administrar su dinero. Y prefieren comprar productos de alta calidad de marcas reconocidas.
Por otra parte, los consumidores más jóvenes están seriamente preocupados por las causas sociales y medioambientales. Cada vez más vemos cómo sus creencias se ven reflejadas en sus hábitos de compra, apostando por las marcas alineadas con sus valores. Esto ha hecho que los “Millennials” opten por firmas que empleen materiales sin procesos químicos y que tengan un modelo de producción basado en técnicas tradicionales y artesanales.
Asimismo, el aumento de la conciencia social sobre los efectos de la producción textil ha provocado que este grupo de población se incline por el comercio de proximidad, reduciendo así el gasto energético, las emisiones de CO2 y aumentado el respeto por la biodiversidad y el entorno.
En palabras de Rolf Cederström, responsable de Clearpay en el sur de Europa, “Hace años que asistimos a una preocupación creciente por el impacto ambiental que tiene nuestra forma de consumir sobre el entorno. Los consumidores están más concienciados de la importancia de apostar por empresas que estén alineadas con sus propios valores en torno al medio ambiente. Y cuando se trata de moda, la preocupación es mayor.” Y añade: “Con este estudio, pretendemos visibilizar la necesidad de conocer los hábitos de compra, los gastos de los “Millennials” con otros grupos de edad (Generación X) e incluso la forma que tienen de administrar su economía, especialmente en artículos de belleza y moda. Además, hemos observado un creciente interés por la moda sostenible, como parte de un estilo de vida. Estamos convencidos de que la revolución medioambiental solo acaba de empezar”.
El coste de la ropa sostenible
Producir algo que sea ambientalmente sostenible, cuesta significativamente más que seguir con el modelo actual. Sin embargo, cuando las cosas se hacen bien y todos los implicados en la producción de una prenda perciben el precio justo por su trabajo, entonces no hablaríamos de un coste elevado, sino apropiado.
A pesar de que esta generación cada vez prefiere más invertir en moda sostenible, no lo hace con la frecuencia que les gustaría porque el coste es mucho más elevado y termina optando, en definitiva, por las prendas más económicas, la comodidad y el mejor estilo