El equipo de gobierno municipal de Pinoso, el tripartito que forman Partido Socialista, Partido Social Demócrata y Bloc d’El Pinós, ha anunciado de forma pública y unánime su rotundo rechazo a la instalación de un almacén subterráneo de 1,5 millones de metros cúbicos de petróleo en el monte Cabezo de la Sal. Con tal fin el alcalde, el socialista Lázaro Azorín, se ha comprometido a elaborar una ordenanza municipal en materia urbanística que prohiba el desarrollo de una actuación de esas características dentro del término pinosero.
El tripartito también solicitará al grupo popular, antes en el gobierno y ahora en la oposición, que suscriba un «irrenunciable y contundente no» al petróleo en la emblemática montaña en un pleno que será convocado en próximas fechas. Del mismo modo el Ayuntamiento seguirá con las gestiones ante la Conselleria de Medio Ambiente para obtener la declaración del Cabezo de la Sal o Diapiro Salino como Paraje Natural Municipal para garantizar su plena protección y recabará, al mismo tiempo, el apoyo expreso de los ayuntamientos vecinos mediante mociones plenarias. Pero hay más. El primer edil ha invitado a todos los vecinos a colocar por la localidad pancartas contra el proyecto de almacenamiento de hidrocarburos, pancartas que serán distribuidas por el propio Ayuntamiento y que pretenden quebrar las aspiraciones de la Corporación de Reservas Estratégicas de Productos Petrolíferos, que depende del Ministerio de Industria, de ubicar en el año 2014 el polémico depósito en este tranquilo pueblo del Medio Vinalopó.
De todo ello habló Lázaro Azorín en la primera asamblea pública convocada por la Plataforma El Cabezo Libre de Petróleo y celebrada en la Casa de Cultura de Pinoso. Al acto, que tenía un carácter meramente informativo, asistió más de un centenar de vecinos y durante la larga reunión se dieron a conocer las diversas infraestructuras de las que podría constar la reserva estratégica de petróleo en el Cabezo de la Sal. El complejo proyectado por una poderosa compañía del sector energético comprendería la instalación de balsas de salmuera de 1,5 millones de metros cúbicos de crudo cercanas al municipio y conectadas a través de un salmueroducto a los pozos de sal. Se construiría un oleoducto de aproximadamente 110 kilómetros entre el puerto de Cartagena y Pinoso, y se aprovecharían las cavernas salinas subterráneas ya existentes en el monte del Cabezo para almacenar el combustible. Todo ello, según advirtieron los portavoces de la Plataforma, podría generar importantes riesgos para la seguridad, la salud, la tranquilidad, el turismo y el medio ambiente de la población.
También el próximo sábado, a las siete de la tarde, Pedro Costa Morata, el Premio Nacional de Medioambiente, tratará esta problemática al finalizar la presentación de su libro «Ecologíada (100 Batallas)» en la Casa del Vino.
Aunque la Plataforma El Cabezo Libre de Petróleo tiene información de que la empresa que está detrás de la iniciativa ha ralentizado la tramitación del proyecto, sus miembros también han podido averiguar que la firma sigue adelante con sus planes. Prueba de ello es la solicitud publicada en junio de 2010 en el Boletín Oficial del Estado, en el que la sociedad Invexta Recursos solicita a la Autoridad Portuaria de Cartagena el otorgamiento de una concesión administrativa para ocupar 13.380 metros cuadrados en el puerto, con el fin de poder descargar y bombear la reserva estratégica de crudo.
PÉREZ GIL | www.informacion.com