En el Día Mundial del Medio Ambiente, WWF alerta de que el consumo creciente, la ineficiencia en el uso de recursos y el crecimiento de población son las tres causas principales de la pérdida de capital natural. Así se recoge en el nuevo Informe Planeta Vivo de WWF, un documento que subraya la necesidad de una revisión profunda del modelo de desarrollo ante la presión que sufre el planeta. La organización insiste en que este debate debe aportar soluciones durante la celebración de la Conferencia sobre Desarrollo Sostenible (Río+20). La Huella Ecológica del mundo es tal que la humanidad necesitaría 1,5 planetas Tierra para satisfacer la demanda de recursos, más de dos en 2030 y casi tres para 2050. España consume hoy día el equivalente a más de tres países.
Las cifras más impactantes:
· Casi tres mil millones de personas sufren grave escasez de agua
· Dos de cada tres personas vivirán en una ciudad en 2050
· Cada año se destruyen 13 millones de ha. de masa forestal
· 500 millones de personas, afectadas por la construcción de presas
· 52% de los stocks de pescado marino, plenamente explotado
· Entre 1996 y 2005, 92% del agua consumida por la agricultura
· Sólo una tercera parte de los ríos del mundo de más de 1.000 km, sin presas en sus principales cauces
· En 40 años, España ha duplicado su huella ecológica global
WWF, en colaboración con la Sociedad Zoológica de Londres y la Red Global de la Huella, publica desde 1998 el Informe Planeta Vivo que analiza la presión del consumo de la humanidad sobre los recursos naturales y la tasa de pérdida de biodiversidad. En esta novena edición, se incluye un análisis de las tendencias de 9.014 poblaciones de 2.688 especies, se destaca la relación entre biodiversidad, biocapacidad y desarrollo humano, se profundiza en aspectos socio-económicos y, por primera vez, se calcula la disponibilidad de agua durante todo el año en las principales cuencas fluviales del mundo.
El Índice Planeta Vivo (IPV) es ya uno de los indicadores de referencia para medir el estado de la biodiversidad mundial, analizando la evolución de las poblaciones de especies de vertebrados. En los últimos 38 años, el IPV ha descendido casi un 30%, especialmente en los trópicos, donde ha disminuido un 60% El índice tropical de agua dulce ha sido el que ha tenido un mayor descenso, un 70%.
Por otro lado, la Huella Ecológica analiza las demandas humanas sobre la biosfera, comparando el consumo de la humanidad con la capacidad regenerativa de la Tierra, o biocapacidad. El informe destaca que en 2008 la Huella Ecológica superó en más de la mitad a la biocapacidad. Esto significa que la Tierra necesita 1,5 años para regenerar los recursos renovables utilizados en 2008. Qatar, Kuwait, Emiratos Árabes Unidos, Dinamarca y EE.UU. son los cinco países del mundo con mayor Huella Ecológica. Nuestro país ocupa el puesto número 25 y, al actual ritmo de consumo, necesitaría “3,25 Españas”. Asimismo, el estudio también subraya la grave situación de las cuencas fluviales del mundo: 2.700 millones de personas viven con una escasez grave de agua durante al menos un mes al año.
Otros datos preocupantes destacados en el informe son los relacionados con la deforestación y degradación forestal, las emisiones de CO2 a la atmósfera, el colapso de las pesquerías – cuyas capturas se han multiplicado por cinco, pasando de 19 millones de toneladas en 1950 a 87 millones de toneladas en 2005, los conflictos por la tierra, o el vertiginoso aumento de población urbana, que actualmente supone el 47% del total de población mundial.
El informe plantea una serie de soluciones para revertir la situación y vivir en los límites de un planeta. Se trata de 16 medidas prioritarias en torno a cinco grandes retos: proteger el capital natural, producir de forma más eficiente, consumir de forma más responsable, reorientar los flujos financieros y gestionar los recursos de forma equitativa.
Juan Carlos del Olmo, Secretario General de WWF España, apunta: “Vivimos como si tuviéramos un planeta extra a nuestra disposición y esta situación es insostenible e injusta, porque son los países más pobres y vulnerables los que están sufriendo especialmente la pérdida de biodiversidad, ecosistemas y los servicios ambientales de los que dependen todos los seres vivos”. Y concluye: “Los retos están claros en el informe, por lo que Río +20 debe ser el momento de iniciar la verdadera ruta hacia la sostenibilidad”.
Coral García | WWF