El jilguero y el pardillo, también la tórtola o la perdiz roja, además de la lechuza, la golondrina o el gorrión: cada vez son menos en nuestro país. Estas especies, tan cercanas al ser humano, ven transformarse los mosaicos agropecuarios y los entornos rurales en los que se mueven, y responden con declives próximos, incluso, al cuarenta por ciento. Cambia el paisaje, también el clima y, a su vez, las aves, mientras SEO/BirdLife, la organización que las contabiliza y defiende, ya no pide leyes sino frenar su cumplimiento.
Este es el tema de apertura del último número de Aves y naturaleza -la revista de SEO/BirdLife- que hace hincapié en la pérdida de tres millones de golondrinas, ocho millones de gorriones y un cuarenta por ciento de lechuzas y mochuelos en los últimos años.
Los datos aparecidos en Aves y naturaleza forman parte del reciente estudio lanzado por SEO/BirdLife sobre la avifauna en España -“Programas de Seguimiento de Avifauna 2011”-, donde se muestra cómo la pérdida del pastoreo extensivo y el uso de insecticidas y herbicidas modifican el territorio y su fauna asociada. Por el contrario, la superficie forestal ha aumentado, muchos bosques han madurado y, como consecuencia, las aves ligadas a este medio tienen una evolución positiva.
José Carlos del Moral | SEO/BirdLife