La organización está estableciendo alianzas con Sistemas Colectivos de Responsabilidad Ampliada del Productor (SCRAPs) especializados en la gestión de envases industriales para facilitar a sus clientes el cumplimiento de la normativa sobre estos envases, que comenzó el pasado 1 de enero de 2025.
De esta manera, Ecoembes culmina la configuración de una solución para todos los envases: los domésticos, que gestiona desde hace casi tres décadas en nuestro país; los comerciales, a los que da respuesta desde su nuevo SCRAP Ecoembes Comerciales, que opera desde el inicio de este mismo año; y los industriales, a través de acuerdos con otros SCRAPs especializados en ellos.
“Los envases domésticos y comerciales tienen muchas sinergias en su gestión, por lo que nos encargamos desde Ecoembes. Para los industriales, optamos por alianzas con sistemas que están especializados en este tipo de envases”, explica Rebeca Mella, gerente de Desarrollo de Valor a Cliente en Ecoembes. El objetivo de la organización es ponérselo fácil a sus más de 20.000 clientes, “que puedan seguir contando con su partner ambiental de confianza para garantizar la circularidad de todos sus envases, con la tranquilidad de cumplir la normativa en tiempo y forma, pero también acompañados con otros servicios que impulsan su desarrollo y competitividad”, añade.
Desde 2024, la organización ya ha firmado acuerdos con varios SCRAPs para la gestión de envases industriales que las empresas ponen en el mercado, como Cartón Circular, Envalora, Genci, Implica y Sun Repack, y continuará colaborando con más sistemas para que sus clientes puedan elegir la solución que más se adapte a sus necesidades. Estos acuerdos ofrecen soluciones para diferentes categorías de envases industriales -reutilizables y de un solo uso, y de todos los materiales-, y facilitan al cliente su adhesión al SCRAP de su elección a través de un sencillo proceso con Ecoembes, mientras que la operativa la lleva a cabo directamente el SCRAP de industriales.
2025: un año clave para la circularidad de los envases
Este año 2025 tiene una especial relevancia en el camino que transita nuestro país hacia una economía plenamente circular. Desde el 1 de enero, gracias al impulso de la normativa, las empresas se responsabilizan de la gestión de los residuos que generan todos sus envases, además de su circularidad a lo largo de su ciclo de vida. Una responsabilidad que ya cumplen desde 1997 para los envases domésticos -los que pueden adquirir los particulares-, y que se extiende ahora a los envases comerciales -destinados a la actividad comercial- y los industriales -destinados al uso propio de la actividad económica de las industrias, explotaciones agrícolas, ganaderas, forestales o acuícolas-.
Además, en febrero ha entrado en vigor el nuevo Reglamento Europeo de Envases y Residuos de Envases, que establece un nuevo marco para la gestión de los envases en toda la Unión Europea, centrándose no sólo en el reciclaje, sino con un especial foco en la prevención del residuo desde su fase de diseño.
“Tenemos claro que, aunque el progreso en circularidad ha sido significativo en las últimas décadas, no podemos parar aquí. Hay mucho trabajo por delante y debemos seguir avanzando unidos para lograr que la sostenibilidad sea un eje estratégico en el negocio de nuestros clientes”, concluye Rebeca Mella.
Paloma Gómez