El proyecto LIFE AdaptCalaMillor ha elegido emplear la fuerza expresiva del arte urbano como herramienta de transformación y catalizador para afrontar el desafío socioambiental del cambio climático y la necesaria adaptación de las playas urbanas a sus consecuencias.
El proyecto LIFE AdaptCalaMillor ha apostado por el arte urbano como herramienta para generar conciencia social sobre la importancia de la Posidonia oceanica y sus valores ecosistémicos. Esta iniciativa forma parte de las medidas de sensibilización en la vía pública del proyecto que busca adaptar la bahía de Cala Millor al cambio climático.
Se trata de un mural de diseño inédito en el puerto de Cala Bona (Mallorca), realizado por el artista de Son Servera SATH. En sus palabras, el arte urbano es “una gran herramienta comunicativa para llegar a todo tipo de público, sin restricciones de edad o estatus social, con la simple intención de acercar el arte a la gente”. Además, ayuda a generar conciencia social al visibilizar los desafíos o problemas actuales, “Pienso que el arte urbano puede transformar un espacio, así como a las personas que lo observen” agrega.
La obra titulada «Posseidònia», es una fusión de las palabras «posseir» y Posidonia» (del catalán poseer y Posidonia). Este mural busca generar un sentimiento de pertenencia con el proyecto y perdurar en el tiempo, trascendiendo los límites temporales del mismo para lograr una eficacia cultural del mensaje.
Con esta acción se busca transmitir la importancia de la Posidonia oceanica para el ecosistema marino. Esta planta endémica del mar Mediterráneo, forma praderas extensas y brinda numerosos beneficios ecosistémicos: desempeña un papel significativo en la dinámica sedimentaria, ya que su dosel foliar favorece la sedimentación y retención de partículas en suspensión en el agua, mientras que sus raíces mantienen el sedimento inmóvil; además, atenúa el oleaje, entierra CO2 durante siglos o milenios, constituye el hogar de numerosos organismos, contribuye a la depuración de las aguas y genera grandes cantidades de oxígeno en el fondo marino, entre otros beneficios.
El mural se incorpora a la ruta de arte urbano Color Millor, una colección artística de gran formato que ya cuenta con siete murales. Esta iniciativa nació con la intención de crear un museo al aire libre, buscando “una reacción y un diálogo con el espectador de la calle; una manera potente de crear comunidad y de transmitir valores, historias y positivismo, al tiempo que se rehabilita un espacio público”, según sus organizadores.
En el evento de presentación del mural realizado el 25 de julio, Diego Viu, director general de Economía Circular, Transición Energética y Cambio Climático ha explicado: “Es muy importante realizar este tipo de acciones, que nos ayudan a comunicar, visibilizar y sensibilizar sobre la preservación del medio ambiente y en la lucha contra el cambio climático en las Illes Balears”.
Foto: Diego Viu, director general de Economía Circular, Transición Energética y Cambio Climático, en la presentación del mural el 25 de julio de 2024.
Participación comunitaria y gobernanza
Trascendiendo la vertiente decorativa de la obra, se pretende trasladar un mensaje que contribuya positivamente a la comunidad y al cuidado del medio ambiente; interviniendo el espacio público, favoreciendo el valor del patrimonio cultural de Cala Millor y evocando uno de los pilares del proyecto: la comprensión y colaboración de los actores que tienen intereses y competencias en la bahía, entre ellos la ciudadanía.
En ese sentido, el proyecto LIFE AdaptCalaMillor desarrolla un enfoque innovador para diseñar un proyecto que propone la transformación del sistema de playas y del área urbana de la bahía de Cala Millor, con el fin de adaptarse al cambio climático a largo plazo. Esto se logrará mediante la implementación de mecanismos de gobernanza y participación que permitirán tomar decisiones sólidas basadas en la ciencia. Es una experiencia única en España para el diseño de proyectos transformadores de adaptación al cambio climático en playas urbanas.
Hasta la fecha, el proyecto ha llevado a cabo diversas acciones que involucran a la sociedad y a las partes interesadas. “Hemos realizado más de 380 entrevistas a turistas, más de 100 a docentes y más de 850 a escolares para conocer su percepción sobre el cambio climático y así generar campañas de sensibilización adaptadas a cada público”, destaca Aida Pericàs-Palou, investigadora del Sistema de Observación y Predicción Costero de las Illes Balears (ICTS SOCIB) y responsable de este trabajo en el marco del proyecto. Además, “hemos formado un grupo de trabajo que mejora la comunicación y coordinación entre las entidades locales, insulares, autonómicas y estatales con competencias en la gestión y planificación de la zona costera de las Illes Balears” añade.
Foto: SATH foto del mural completo en el Port de Cala Bona (Mallorca)