Un equipo de científicos franceses, en colaboración con WWF, ha conseguido aislar por primera vez ADN de oso polar de una huella en la nieve. Los científicos analizaron dos muestras de agua tomadas de las pisadas de un oso polar en la nieve, recogidas a principios de este año durante la expedición de WWF-Canon y el Instituto Polar Noruego al archipiélago de Svalbard.
“Estos resultados son muy emocionantes”, ha declarado Eva Bellemain, la líder del equipo investigador de la empresa SPYGEN. “Es la primera vez que hemos podido extraer ADN de las huellas dejadas por un oso polar. No sólo encontramos el ADN del oso, también el de una foca y una gaviota. El equipo de WWF que recogió las muestras presenció como el oso cazó la foca, y después varias gaviotas aparecieron en el lugar para intentar participar en el festín, así que una sola huella nos cuenta toda la historia”, ha añadido.
En un entorno tan remoto e inmenso como el Ártico, que además está transformándose a gran velocidad, es todo un desafío mantener información actualizada y precisa sobre las poblaciones de oso polar. En abril de este año, un equipo de WWF-Canon se embarcó con el Instituto Polar Noruego en una expedición científica por el archipiélago de Svalbard (Noruega), para investigar cómo está afectando el cambio climático a este rincón del Ártico.
“Este método sería una herramienta impagable para la biología de la conservación”, dice Arnaud Lyet de WWF. “En la actualidad, los investigadores usan técnicas muy caras e invasivas para estudiar el estado de las poblaciones salvajes de especies como el oso polar. Tomando ADN de huellas, podríamos reducir espectacularmente el presupuesto necesario para investigar, así que seguir las poblaciones sería muchísimo más fácil”.
El equipo espera perfeccionar el análisis del ADN de oso polar, para que cuente más sobre el animal. También, ver si el método puede aplicarse a otras especies tan esquivas y difíciles de alcanzar como los osos polares.
“Este es un gran ejemplo de innovación científica de la última expedición al Ártico, y estamos orgullosos de haber apoyado la recolección de las muestras”, dice Susan Stuart, la Directora de Sostenibilidad de Canon Europa. “Este descubrimiento demuestra que invertir en ciencia en el Ártico tiene el potencial de provocar cambios reales”.
Guillermo Prudencio | WWF