Cambiar el color de las nubes, «fertilizar» el océano con hierro para favorecer que las algas absorban CO2 o rociar la estratosfera con aerosoles de sulfato para reflejar la luz solar en el espacio son algunas de las medidas para combatir el cambio climático que se evaluaron en una reunión de expertos internacionales en geoingenería, convocada por un programa de las Naciones Unidas y realizada en nuestra capital. En el evento, Rajendra Pachauri, presidente del Grupo Intergubernamental de la ONU contra el Cambio Climático (IPCC), programa que organizó la reunión, llevada a cabo en la cancillería peruana desde este lunes, manifestó que el mundo debe conocer las soluciones de la geoingenería para frenar el cambio climático.
Contra esa reunión ONGs de 40 países dirigieron a Pachauri una carta abierta en la que consideran «alarmante» la idea de intervenir en el medio ambiente para cambiar el clima y alertan de posibles consecuencias indeseadas para el delicado equilibrio bioclimático.
«Es un enfoque altamente riesgoso, con grandes impactos y gran potencial de usos militares y hostiles contra los pueblos por parte de quienes controlan las tecnologías», señala en la carta el Grupo de Acción sobre Erosión, tecnología y Concentración de México, el cual afirma representar a 40 ONGs de diversas partes del mundo.
«¿No cree que se deben entender todos los aspectos del cambio climático? Sólo estamos tratando de acumular conocimientos en la materia. Es una reunión de expertos, lo que no demuestra un compromiso con un tipo de solución. Lo que hacemos es ver todo el conocimiento que hay en este campo», afirmó Pachauri, premio Nobel de la Paz en 2007.
LAS POLÉMICAS MEDIDAS
La geoingeniería se encarga de manipular intencionalmente el clima de la tierra para combatir el cambio climático, según la Royal Society. Para el alemán Ottmar Edenhofer, copresidente del grupo de trabajo que abarcó la mitigación del cambio climático, las técnicas que propone esta ciencia se dividen en dos categorías: la gestión de radiación solar y la remoción de dióxido de carbono.
«Un ejemplo del balance de la radiación solar alterada es la inyección de aerosoles en la atmósfera y estratósfera», sostuvo Edenhofer. «Con el cambio de brillo en las nubes, los océanos se acidifican porque no hemos resuelto el problema del dióxido de carbono», afirmó Christopher Field, copresidente del grupo de trabajo que comprendió los impactos del cambio climático.
«Estamos en las etapas iniciales de estudio de estas nuevas tecnologías que podrían ser útiles para responder al cambio climático», explicó también Field.
Finalmente, los científicos coincidieron en que el PICC está sometiendo estas nuevas tecnologías a una «evaluación comprensiva como diferentes opciones para la mitigación del cambio climático».
¿Y tú qué opinas sobre la posibilidad de modificar el clima para oontrarrestar los embates del cambio climático? ¿La solución podría ser peor que el mismo problema?
Fuente: elcomercio.com