Las abundantes lluvias que han traído las borrascas atlánticas han permitido la inundación de la marisma y las lagunas temporales de Doñana, representando un alivio para la situación de las comunidades vegetales y la fauna acuática y terrestre. Ante este escenario, SEO/BirdLife advierte de que es necesario que se pongan en marcha las medidas que garantizan la conservación del humedal más importante de España más allá de esta circunstancia como es la puesta en marcha del Plan Especial para la ordenación de las zonas de cultivo en regadío o las medidas de restauración hidrológica recogidas en el Marco de Actuaciones para Doñana.
Ante esta situación de abundancia de agua, la ONG apunta que, si los registros de temperatura no son demasiado elevados, el mantenimiento de la inundación durante los próximos meses podría significar la cría exitosa de numerosas especies de aves acuáticas, lo cual es una noticia importante tras varios años con malos datos de reproducción por escasez de agua.
Lamentablemente, las tendencias poblacionales negativas de las aves invernantes y reproductoras, la sobreexplotación de los acuíferos, la contaminación de las aguas y la enorme incertidumbre que genera el cambio climático sobre el futuro del parque nacional, no se van a solucionar con un marzo lluvioso, pero sí da pie a generar una percepción social positiva sobre el parque nacional y supone un estímulo para implementar los compromisos previstos para el rescate de Doñana a medio y largo plazo.
Peticiones para una Doñana con futuro
Precisamente, para que esta recuperación no sea un espejismo, SEO/BirdLife solicita a las Administraciones públicas –Gobierno de España, comunidad autónoma y entidades locales– y a todos los sectores productivos implicados a actuar de forma conjunta, integral y urgente. Es necesario, por tanto, acelerar las medidas de restauración hidrológica programadas en el Marco de Actuaciones para Doñana presentado por el Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico (Miteco).
Del mismo modo, la ONG ambiental pide que se abandone de la iniciativa para inyectar gas en el subsuelo de Doñana (marismas 3NE), por la falta de una evaluación adecuada del riesgo que implica y ser un modelo energético contrario al desarrollo sostenible de Doñana y los planes de restauración ecológica en marcha.
También solicita que se actúe sobre la restauración de humedales de enorme potencial para las poblaciones de aves acuáticas migratorias, como la laguna de La Janda (Cádiz), incluida en las acciones del Plan estratégico de Humedales 2030.
Así mismo, la organización reclama a la Junta de Andalucía que implemente las actuaciones incluidas en el Plan Especial para la ordenación de las zonas con cultivos en regadío localizadas al norte de la corona forestal de Doñana, que cumpla con su propio Plan de Recuperación y Conservación de Aves de Humedales, con los compromisos adquiridos ante la Unión Europea en el Plan de Gestión del espacio Red Natura 2000 y que asuma las recomendaciones de organismos internacionales como la UNESCO, la UICN y la Convención Ramsar, incluyendo llevar ante el Consejo de Participación de Doñana el proyecto de reapertura de la mina de Aznalcóllar para que pueda informar sobre la afección de los vertidos mineros al estuario del Guadalquivir.
En opinión de Carlos Davila, responsable de la Oficina Técnica de SEO/BirdLife en Doñana: “La marisma volverá a secarse, pero es el momento de actuar con responsabilidad y compromiso. Ahora más que nunca, es necesario huir de mensajes cortoplacistas e interesados. La alegría por unas lluvias necesarias no debe convertirse en una excusa para discursos negacionistas y populistas que buscan restar credibilidad a los hechos científicos y frenar la adopción de medidas esenciales de adaptación y mitigación frente al cambio climático, así como la gestión sostenible de los recursos hídricos del parque y su entorno.”
La ONG destaca que la comunidad científica y las organizaciones de conservación de la naturaleza nacionales e internacionales insisten en que solo con una gestión responsable y sostenible se podrá garantizar el futuro de Doñana. “Reclamamos la adopción de medidas urgentes para conseguir una Doñana resiliente ante los fenómenos meteorológicos extremos, como los largos ciclos secos, el cambio en el patrón de lluvias y la crisis de biodiversidad que siguen amenazando este espacio natural único”, subraya Davila.
Problemas crónicos
Aunque las extraordinarias lluvias de marzo han inundado las marismas de Doñana, y han generado un clima de optimismo para consolidar la recuperación de este humedal declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, SEO/BirdLife destaca la importancia de ser más conscientes que nunca de sus múltiples amenazas. La sobreexplotación de los acuíferos por uso agrario y turístico, y la contaminación de las aguas a partir de nitratos de origen agrícola, la sedimentación, el exceso de predadores oportunistas o la deficiente depuración de aguas residuales de origen urbano, son algunos de los problemas que requieren una solución urgente.
Hay un aspecto que preocupa especialmente a la organización en el caso de que el nivel hídrico en la marisma disminuyera rápidamente. Si esto sucediera, cobraría especial importancia el mantenimiento en buen estado de los vallados alrededor de las principales colonias de cría para impedir, como otros años, el acceso de predadores generalistas, como los jabalíes.
El reciente Informe sobre el Estado de la Biodiversidad en Doñana 2024 presentado por la EBD-CSIC, muestra la realidad de Doñana a partir del conocimiento científico, siendo el segundo año con la mayor temperatura media desde que hay registros y empeorando la situación de las aves acuáticas, al albergar la cifra más baja de aves invernantes censadas en enero desde que existe información.
Algunas especies emblemáticas de Doñana, como los ánsares comunes, están desapareciendo de su paisaje invernal al cambiar sus patrones migratorios. Por ejemplo, la escasez de lluvias durante otoño e invierno, sumado a la existencia de temperaturas más benignas en el centro de Europa, está provocando que los ánsares sean ya un recuerdo del pasado en las marismas de Doñana. En enero de 2025, tan sólo 2.533 ánsares se censaron en Doñana, cuando ha sido habitual contabilizar 40.000-50.000 ejemplares.
prensa | SEO Bird/Life