Avefrías, currucas o perdices son solo algunas de las muchas especies de aves que podemos observar en invierno. Los censos que realizan cientos de voluntarios y voluntarias de SEO/BirdLife cada temporada son fundamentales para detectar el descenso de algunas de estas especies y poder estudiar medidas para su conservación
Desde hace ya casi 15 años cientos de voluntarios y voluntarias distribuidos por todo el país registran las aves presentes en invierno en sus salidas al campo (o en la ciudad), siguiendo una metodología determinada. De esta forma, podemos obtener un indicador del medio a través del conocimiento de las poblaciones de las aves.
Algunas especies están presentes todo el año en las mismas zonas, otras realizan pequeñas migraciones a zonas más propicias para ellas en invierno, y otras vienen de otros países de Europa a pasar el invierno en nuestro país.
El programa Sacin de Ciencia Ciudadana de SEO/BirdLife tiene como objetivo principal obtener la tendencia de poblacional de las aves en invierno como indicadores de la biodiversidad en esta época del año.
Durante los meses que dura el seguimiento se realizan dos salidas al campo en las que los voluntarios y voluntarias toman nota de las aves detectadas mientras realizan todos los años el mismo recorrido.
¿Por qué es importante seguir a las aves en esta época?
El seguimiento a largo plazo de las poblaciones de aves comunes y dispersas determina la evolución de sus poblaciones y así se puede saber cómo evolucionan las poblaciones de las aves. Es un indicador clave para identificar las especies que tienen problemas de conservación, además de señalar los lugares y hábitats afectados. Cuando esta información se obtiene de poblaciones de aves invernantes, que llegan a España en mayor o menor número según sean los inviernos más o menos duros, también puede servir de termómetro de cómo afecta a la biodiversidad el cambio climático.
Actualmente el programa Sacin ayuda a conocer el estado de las poblaciones de más de 80 especies de aves. Así se sabe que especies como el pinzón vulgar, el colirrojo tizón, la paloma torcaz, la curruca capirotada o el pico picapinos están estables, mientras que otras muestran declive en sus poblaciones, como la perdiz roja, la curruca rabilarga, la alondra común, la calandria común o el escribano montesino.
En tus paseos por el campo o por la ciudad
Salir al campo o pasear por la ciudad con la libreta o un dispositivo móvil puede contribuir a facilitar una valiosa información para el estudio de las aves. Además, esta temporada del programa Sacin 2022-23 tiene como novedad el lanzamiento de un vídeo con el fin de facilitar a todas las personas voluntarias que participan en el seguimiento de aves su trabajo. De una forma didáctica podemos conocer por qué es importante registrar las aves en invierno y cómo con tan solo dos recorridos todos los años podemos colaborar con la Ciencia Ciudadana.
“Conocer el estado de conservación de más de 80 especies de aves permite además del conocimiento individual de las poblaciones de cada una de ellas, obtener un indicador de biodiversidad del medio. En invierno, los movimientos de las aves pueden guiarse por las variables climáticas, por lo que este índice podría servir también como indicador del cambio climático”, señala Virginia Escandell, coordinadora del programa Sacin de SEO/BirdLife.
Las personas interesadas en participar en el programa Sacin encontrarán toda la información aquí o pueden contactar directamente con sacin@seo.org / 91 434 09 10
VIDEO: Sacin, voluntarios para conocer las poblaciones de aves en invierno